El Valle de las Rosas

El Valle de las Rosas está situado a los pies del Alto Atlas en Marruecos, en la confluencia con el Valle del Dades. El río Asif M’Goun riega el valle, que tiene su principal acceso por el pueblo de Kelaat M’Gouna.

El cultivo de rosas se reparte en dos zonas geográficas distintas: la primera comienza a unos 10 kilómetros del pueblo de Kelaat M’Gouna y se extiende 10 kilómetros hasta las inmediaciones de la localidad de Boumalne Dades.

La segunda zona de cultivo y, con creces, la más importante y la más interesante desde el punto de vista del turismo, comienza en Kelaat M’Gouna y se extiende a través de una carretera comarcal que sube hacia el norte, hasta el pueblo de Bou Tharar por el otro extremo; es decir, alrededor de unos 30 kilómetros ininterrumpidos de cultivo de rosas a lo largo del uadi (curso seco o estacional de agua). Este valle de espléndido verdor, enclavado a los pies de un cañón de tintes ocres, ofrece un espectáculo de absoluta belleza y forma parte de los parajes turísticos más importantes de Marruecos.

Visita turística al Valle de las Rosas

Para visitar el valle, son posibles varias opciones:

Visita en 2 días:

Salida de la ciudad de Kelaat M’Gouna, bordeando el lecho del río. Se pasa por delante de dos ksars (castillos) en parte abandonados, bastante surrealistas y muy fotogénicos, después continuamos en dirección al pueblo de Tabarkhacht. La primera etapa termina en el pueblo de Hadida, en el corazón del Valle de la Rosas, en un entorno excepcional; este trayecto representa unos 17 km de marcha. En el pueblo de Hadida, existen varios alojamientos para pasar la noche, entre ellos la Kasbah des Roses, donde se destilan las rosas y que podemos visitar. También se pueden comprar los productos de las rosas, con certificación BIO. Este trayecto puede hacerse con la ayuda de muleros para transportar las bolsas y otros equipos pesados, así como a los niños.

El segundo día, saliendo del pueblo de Hadida, continuamos el trayecto por el lecho del río, rodeado de acantilados abruptos de color ocre hasta Tourbist, pueblecito encantador y auténtico. Después llegamos, al final del recorrido, a Bou Tharar, que es sin duda uno de los pueblos más bellos del Valle de las Rosas.

Este segundo tramo del recorrido es mucho más atractivo y es recomendable hacer la marcha de un día desde Hadida.

Para una visita de algunas horas, lo ideal es salir de la Kasbah des Roses, en la localidad de Hadida, para tomar más abajo el lecho del río. Después se pasa por un vado boscoso para llegar, al otro lado del río, al verdadero corazón del Valle de las Rosas y perderse por los meandros de pequeños senderos bucólicos, hasta llegar a Tourbist.

Si el Valle de las Rosas ofrece un encanto particular durante el periodo de la floración de las rosas, su encanto perdura a lo largo de todo el año. Cada estación tiene su atractivo: en verano, el clima de la montaña y los baños en el río proporcionan frescor a aquellos que soportan el calor de la llanura; en primavera tiene lugar la floración de la rosas; en otoño, el cielo puro permite contemplar la bóveda estrellada y gozar de temperaturas ideales; en invierno, los días son soleados y muy agradables para hacer excursiones a pie o en 4X4.

El zoco, el mercado local

Una vez por semana en el pueblo de Kelaat M’Gouna tiene lugar un importante mercado. Numerosos productores de la región acuden para vender sus productos en un ambiente agradable. Aquí los precios son más económicos que en los comercios tradicionales, pueden encontrarse tanto productos alimenticios como productos de artesanía.

Otros lugares turísticos para visitar

Pueden realizarse numerosas excursiones, con un acompañante o un guía experimentado, con salida en los pueblos de Hadida y de Bou Tharar, para ir hasta la cima del Ighil M’Goun, las gargantas de Agouti, las gargantas de Aitmrou, o hasta las gargantas más conocidas del Dades y del Todra. El Valle de las Rosas se encuentra en la confluencia de los parajes más importantes del sur de Marruecos, como las dunas de Merzouga, el valle del Draa hacia Zagora, así como el Jbel Saghro, entre el Alto Atlas y el desierto del Sáhara.

La Fiesta de la Rosa

La Fiesta de la Rosa o Moussem de las Rosas, se celebra el segundo fin de semana de mayo y dura dos días. Tienen lugar numerosas festividades, con actuaciones de grupos folclóricos y la elección de la Miss de las Rosas, que desfila en una carroza decorada. A esta fiesta vienen comerciantes de toda la región para vender sus especialidades y sus productos de artesanía. Esta fiesta un poco « kitsch » debería representar mejor a la rosa, en lugar de exhibir flores de plástico y aromas sintéticos de rosa. Esperemos que, en un futuro próximo, se convierta en un verdadero himno a la rosa.